El diseño de una cocina pequeña con dos frentes supone un reto en la optimización del espacio, sin renunciar a la estética ni a la funcionalidad. En este proyecto, cada elemento ha sido seleccionado para ofrecer comodidad, eficiencia y un diseño elegante con acabados en tonos oscuros y detalles en acero inoxidable.
Para garantizar un espacio limpio y armónico, los electrodomésticos de Balay se han integrado perfectamente en el mobiliario, dejándolos a la vista. La encimera de inducción de 60 cm con zona de 28 cm y control táctil facilita la cocción con precisión, mientras que la campana decorativa integrable asegura una extracción eficiente.
El equipamiento se completa con un horno multifunción, un microondas encastrable con marco de acero inoxidable, y un lavavajillas totalmente integrable, ideal para mantener el orden sin romper la estética del conjunto.
El fregadero Plados One N6 Deep Black, en armonía con el grifo extraíble en acabado negro mate, aporta un toque sofisticado y funcional. Además, el selector de cubos facilita la gestión de residuos de manera eficiente.
Esta cocina demuestra que el equilibrio entre diseño y funcionalidad es posible, incluso en espacios reducidos. Cada detalle contribuye a crear un ambiente práctico y elegante, donde la tecnología y la estética conviven en perfecta armonía.